Del 16 al 19 de octubre de 2025, se celebrará una nueva edición de Madrid Otra Mirada (MOM), el evento que abre las puertas del patrimonio madrileño para que la ciudadanía pueda conocer su historia, sus secretos y su riqueza cultural desde una perspectiva más cercana y accesible. Esta cita anual se ha convertido en una de las propuestas más esperadas del otoño madrileño, gracias a su capacidad de unir divulgación, memoria y experiencia.
Durante cuatro días, centenares de espacios de alto valor arquitectónico, artístico o social —algunos de ellos cerrados al público durante todo el año— organizan visitas guiadas, actividades educativas, rutas temáticas y encuentros con profesionales. MOM permite redescubrir Madrid desde la mirada del detalle, la historia y la curiosidad, y convierte a la ciudad en un aula viva a la que todos están invitados.

Edificios que abren sus puertas al asombro
Uno de los mayores atractivos del MOM es la apertura de edificios que habitualmente no pueden visitarse, o que muchas veces se pasan por alto pese a su relevancia. Palacetes, iglesias, sedes institucionales, embajadas, antiguos hospitales, talleres, bibliotecas y edificios modernistas o racionalistas forman parte de un recorrido que mezcla distintas épocas y estilos.
Cada visita se convierte en una oportunidad para escuchar historias sobre su construcción, sus funciones, sus restauraciones y los personajes que han pasado por ellos. Más que una simple entrada, cada acceso es una llave a una parte oculta del relato urbano, donde se descubre cómo Madrid ha sido modelada por siglos de transformación, conflicto y creación artística.
Rutas temáticas para explorar con otros ojos
Además de las visitas individuales, el programa de MOM ofrece rutas temáticas guiadas que permiten explorar el patrimonio de manera transversal. Desde recorridos por la arquitectura religiosa hasta paseos centrados en la mujer en la historia de Madrid, el evento propone miradas plurales y contemporáneas sobre los espacios tradicionales de la ciudad.
Estas rutas permiten contextualizar mejor el papel de ciertos edificios o personajes dentro del tejido social y cultural de la capital. Además, muchas de ellas están diseñadas para públicos específicos, como familias, personas mayores o jóvenes, lo que favorece una experiencia más inclusiva y adaptada a cada tipo de visitante. La ciudad se convierte así en un tablero narrativo en constante reinterpretación.
Patrimonio vivo: talleres y actividades interactivas
El evento no solo invita a mirar, sino también a participar activamente en la comprensión del patrimonio. A lo largo de MOM 2025 se organizarán numerosos talleres, demostraciones artesanales, visitas teatralizadas y actividades infantiles en diferentes enclaves de la ciudad. El objetivo es que el público no sea solo espectador, sino también protagonista del aprendizaje.
Estas iniciativas permiten conectar el pasado con el presente y muestran cómo el patrimonio no es algo estático o intocable, sino una construcción viva que se transforma, se cuida y se interpreta desde el presente. Al ofrecer actividades que combinan saber técnico, juego y creatividad, MOM se consolida como una propuesta pedagógica de alto valor, donde lo cultural se convierte en algo cercano y cotidiano.
Cultura accesible para todas las edades
Uno de los principios fundamentales de Madrid Otra Mirada es su accesibilidad universal. Todas las actividades son gratuitas y están pensadas para facilitar el acceso a personas de distintos perfiles, incluyendo aquellas con movilidad reducida o necesidades específicas. Esta voluntad de apertura convierte al evento en una celebración verdaderamente inclusiva.
Además, se fomenta la participación intergeneracional, ofreciendo propuestas que interesan tanto a personas mayores como a estudiantes, familias con niños o grupos de amigos. La experiencia de recorrer la ciudad desde una nueva perspectiva se vive de forma compartida, y genera conversaciones que van más allá del día de la visita. En muchos casos, MOM despierta nuevas inquietudes y crea vínculos con espacios que se integran en la vida diaria de quienes los descubren.
Una ciudad que se cuenta a sí misma
MOM 2025 es, en definitiva, un relato colectivo sobre Madrid, contado desde sus calles, sus muros, sus ventanas y sus pasillos. No es una actividad turística, sino una forma de devolver la ciudad a sus habitantes, reconociendo el valor del patrimonio como bien común. Cada visita es un gesto de pertenencia, de memoria y de aprecio por aquello que define la identidad madrileña.
Durante cuatro días, la ciudad se abre como un libro con muchas páginas aún por leer. MOM no solo muestra lugares: activa la mirada de quienes los recorren, genera respeto por lo que nos rodea y plantea preguntas sobre cómo habitamos el espacio urbano. Del 16 al 19 de octubre de 2025, Madrid invita a mirar con otros ojos… y a recordar que lo extraordinario muchas veces está a la vuelta de la esquina.