Del 19 al 24 de agosto de 2025, el Teatro de la Gran Vía de Madrid se convierte en el epicentro del ritmo, la fiesta y el desenfreno setentero con el musical We love disco. Esta producción, que rinde homenaje al género disco con una puesta en escena espectacular, trae de vuelta los grandes éxitos de los 70 y 80 en un formato teatral lleno de color, humor y mucho baile. Es un viaje directo al corazón de una época donde la música se vivía con el cuerpo y el alma.
Lejos de ser una simple sucesión de canciones, este espectáculo presenta una historia ligera y divertida que funciona como hilo conductor entre los distintos números musicales. Una oportunidad para cantar, bailar y dejarse llevar por el poder de una banda sonora que forma parte del imaginario colectivo de varias generaciones. La experiencia es tan visual como sonora, y convierte cada función en una verdadera fiesta en la butaca.

Una historia contada a ritmo de pista de baile
La trama se centra en la última noche de una mítica discoteca madrileña, donde un grupo de antiguos amigos se reencuentra con la intención de revivir sus mejores momentos entre bolas de espejos y luces estroboscópicas. A medida que avanza la noche, los recuerdos, las emociones y las canciones sacan a la luz viejos amores, amistades truncadas y sueños pendientes de cumplir.
Este punto de partida da lugar a una narrativa ligera pero cargada de humanidad, en la que cada personaje encuentra su espacio para brillar. La historia se entrelaza con las canciones de forma natural, ofreciendo momentos de comedia, nostalgia y celebración colectiva. La discoteca, más que un escenario, se convierte en un personaje más dentro del musical.
Un repertorio de grandes himnos disco
En el corazón del espectáculo se encuentra una selección imbatible de clásicos del género, con temas como Stayin’ Alive, I Will Survive, Dancing Queen o Le Freak. Estas canciones no solo marcan el ritmo del espectáculo, sino que despiertan una conexión inmediata con el público, que reconoce en ellas la banda sonora de su vida o de las fiestas más memorables.
Los arreglos musicales mantienen la esencia original de los temas, pero se interpretan en directo con una banda que aporta frescura, fuerza y un sonido actual. Cada canción está integrada en la acción escénica, lo que permite que los números musicales no interrumpan la historia, sino que la impulsen y enriquezcan.
Escenografía y vestuario de puro espectáculo
El diseño de escenografía y vestuario es uno de los puntos fuertes del musical. El escenario del Teatro de la Gran Vía se transforma en una pista de baile con todo el brillo posible: bolas de espejos, luces de neón, humo y una ambientación que recrea el universo disco con total fidelidad. El público no solo asiste a un espectáculo, sino que se siente parte de él.
El vestuario es un desfile de lentejuelas, colores eléctricos, pantalones acampanados y plataformas imposibles. Cada cambio de escena ofrece un nuevo impacto visual, reforzando la estética del show y creando una atmósfera envolvente. La dirección artística ha cuidado todos los detalles para que cada número musical sea también un número visual.
Un elenco que transmite pura energía
Los intérpretes del musical destacan por su versatilidad y entrega sobre el escenario. Cantantes, bailarines y actores se mueven con soltura entre los géneros, alternando momentos de interpretación con coreografías dinámicas y ejecuciones vocales impecables. La energía del reparto es contagiosa, y su complicidad sobre el escenario se traduce en una gran conexión con el público.
Cada uno de los protagonistas aporta una personalidad distinta, lo que enriquece la narrativa y permite una identificación rápida por parte del espectador. El trabajo coral del elenco da lugar a escenas potentes y coreografías grupales que elevan el ritmo del espectáculo a su máximo nivel.
Una experiencia para todas las generaciones
We love disco no solo es un tributo a una época, sino una fiesta intergeneracional. Los nostálgicos de la música disco reviven los grandes himnos de su juventud, mientras que el público más joven descubre el magnetismo de un estilo que sigue conquistando pistas de baile en todo el mundo. La fuerza de la música y la puesta en escena consiguen que todos salgan del teatro con una sonrisa y con ganas de bailar.
El Teatro de la Gran Vía ofrece así una propuesta perfecta para el verano madrileño, que combina nostalgia, espectáculo y diversión en dosis iguales. We love disco no solo se ve y se escucha: se vive. Es un espectáculo que recuerda que, con la canción adecuada y el espíritu abierto, siempre es buen momento para salir a la pista y dejarse llevar.